
Las pymes avanzan en materia de sostenibilidad, y en España ya son cuatro de cada diez las pequeñas y medianas empresas que incorporan criterios de sostenibilidad ASG (Ambiental, Social y de Gobernanza) en la gestión.
Este es uno de los principales resultados del Informe «Situación de la ASG en la pyme española», elaborado por la Cámara de España a partir de la información ofrecida por las 750 empresas que han utilizado la herramienta de Autodiagnóstico ASG desarrolla por la institución.
El informe clasifica el grado de madurez de las pymes en materia de sostenibilidad en cuatro niveles: «inicial» (la compañía no aplica o no cumple ninguna medida); «cumplimento básico» (cumple con la regulación correspondiente); «gestión» (además del cumplimiento regulatorio, la empresa establece planes y objetivos para mejorar la gestión) y, por último, «estratégico» (los asuntos ASG forman parte de la estrategia de la empresa y se supervisan por la dirección).
El análisis muestra que la madurez media de las pymes españolas en materia ASG es de 2,52 puntos sobre 4. Lo que implica que las pymes cumplen con la normativa básica en materia ASG y avanzan hacia la integración de estos aspectos en la gestión de la empresa, detalla un artículo de El Economista de España.
Una de las conclusiones del informe es que la gobernanza, que incluye cuestiones como la ética y transparencia, la fiscalidad o la gestión de la lucha contra la corrupción y la competencia desleal, es el ámbito en el que las pymes han avanzado más. En general, el nivel de madurez en este aspecto, con 2,63 puntos, es mayor que en las cuestiones sociales y ambientales.
Ello se explica por qué un mayor porcentaje de pymes ha incluido ya las cuestiones de gobernanza en la gestión y estrategia empresarial, un 20% y 25%, respectivamente.
Sin embargo, la madurez media en la aplicación de un modelo de gestión integral no supera el 2,34. Es decir, las pymes avanzan de manera individual en los aspectos ambientales, sociales y de gobernanza, pero están más rezagadas a la hora de disponer de un modelo que integre todos estos aspectos y determine su gestión con políticas, sistemas y procedimientos específicos de gestión en sostenibilidad.
El estudio también muestra que el grado de madurez en la implantación de aspectos ASG está claramente determinado por el tamaño de la empresa.
Por debajo de 50 empleados, las empresas están más cerca de limitarse a aplicar la regulación existente que de establecer objetivos y planes más avanzados.
A partir de los 50 trabajadores, hay más empresas que llegan a determinar medidas de gestión de los asuntos ASG.-