
La 8va edición de la encuesta a Pymes de PwC Argentina, que durante el segundo trimestre del corriente año sondeó la opinión de empresarios del sector en cuanto a los problemas que enfrentan y sus expectativas, muestra que no hay margen por parte del Estado para restricciones más rígidas y prolongadas como las aplicadas el año anterior.
Para el 74% de los encuestados su situación económica es muy compleja, y se afirma que una mayor restricción o confinamiento ante una nueva ola de contagios afectaría aún más sus magros ingresos.
Con distintos matices, la fuerte presión tributaria (89%), el flagelo de la inflación (84%), la volatilidad del tipo de cambio (64%), y los efectos de la pandemia en el nivel de actividad (62%), son los temas que más inquietan y angustian a los empresarios pymes en su agenda del día a día.
«El mundo está cambiando, la mayoría de las pymes están viviendo un quiebre cultural y están convencidas que la transformación digital es imprescindible para la reactivación de su empresa en esta nueva realidad. La tecnología ya no es una opción, y la digitalización, el teletrabajo y la optimización de procesos son claves, entre otros, para la reactivación», resume el informe.
La encuesta ha reflejado también que, si bien el 59% ya implementó el trabajo remoto, muchas han tenido que reconvertirse y reducir sus costos «drásticamente» para sobrevivir.
«Por otra parte, 8 de cada 10 encuestados manifestaron que la prohibición de despidos y la doble indemnización implementados por la Administración actual genera un mayor ahogo financiero, poniendo de manifiesto una inviabilidad preocupante para muchas de ellas e impidiendo en otros casos, la contratación de nuevo personal», alerta el informe.
Y finaliza: «La pobreza estructural, la recesión prolongada y los altos niveles de inflación que seguramente en el 2021 superarán la meta fijada por el Gobierno condicionando la tan ansiada recuperación; generan desigualdades que erosionan el poder adquisitivo de las familias».–